Sweet love et destructeur
Con la medida que pasa el tiempo, comenzamos a ver la vida bajo matices diferentes.
Realmente creo que llega un punto en la vida donde una comienza a asimilar la realidad, que el amor no es como lo cuentan en las películas y aveces el que mas ama es el que termina perdiendo, aun así crecemos y nos arriesgamos a enamorarnos, somos capaces de entregarnos en cuerpo alma a un ser con un corazón desconocido, apostando por un futuro tal vez incierto pero bajo la satisfacción de haber hecho lo correcto, ya que cualquier cosa es preferible a pasarse media eternidad preguntándose que fuese pasado si lo fuese hecho.
Al fin y al cabo ya con esta edad no nos queda mas que arriesgarnos ante la vida y jugar sin miedo a perder.
Comentarios
Publicar un comentario