Conciliación

En la ciudad de la Droga y el Placer

Entre amores lejanos, canas que quitan el sueño, unas pequeñas vacaciones y una botella de Ron de Caldas.

Al fin logre conciliarme con esta ciudad,  realmente nunca pensé sentirme libre de nuevo en este país que por los últimos siete meses había sido mi ''casa'' y que ahora se a convertido en mi ''hogar''.

Estos últimos días no he dejado de viajar, desde la cima del Valle de Aburrà donde me conecte con la naturaleza y lo mas tribal que se encontraba escondido en lo profundo de mi ser, pasando por la comida paisa que sin duda no es ni la sombra de los platos desabridos de Bogota, hasta el Peñon de Guatape donde sentí la brisa sobre mi rostro y sentí ese lugar como mio.

Conocer parte de esta ciudad me hizo entender por que Pablo Escobar amaba tanto Medellin, desde su gente a su ron que sabe a ballenato con mal de amores. Incluso creo que fue allí mientras me encontraba sentada en una alegre cantina paisa, con un vaso de ron observando las gotas caer donde entendí que siempre estuve equivocada, ¡Si debo estar en esta ciudad!, aunque aun no entienda las razones concretas, este ahora es mi lugar. La vida no es sencilla pero solo hay que saberla vivir con un poco de calma y placer.

Nota:

-Mi padre estará viviendo conmigo por unos meses.

-Mi novio sigue en Miami.

-Mis canas preferidas me siguen quitando el sueño.

-Mi espíritu por fin se siente libre.

-Mi corazón siempre odiara a Bogota (obviare que esa ciudad pertenece a Colombia)

-Mi cabello por fin esta mas largo.