Las Memorias de la Nínfula

Clases de Arquitectura 8:21 a.m De nuevo me siento como en los viejos tiempos donde no sabia si correr o hundirme en las profundidades de mi alcoba, mi miedo a entregarme de nuevo a un hombre casado puede mas que la razón y mi profundo amor por el, hoy me siento tan perdida en esta nublada ciudad, acompañada por las frías gotas de un recuerdo que me parte el corazón, tal vez todo esto sea mi culpa, pero como luchar contra el recuerdo de otra mujer que lo pudo hacer feliz... ''¿Ahora donde voy?, si al lugar donde escapaba de mi tristeza era entre sus brazos...

Un hermoso día lluvioso de Mayo ¿Como negar que ese hombre me cambio la vida?, así con todos sus defectos y extravagancias era el único que había descifrador la clave secreta de mi corazón devorado por los demonios. Allí me encontraba de nuevo tomando un fuerte café entre los brazos de la única persona que ilumina mi mundo con una simple sonrisa, eriza mi piel con una simple caricia, como no querer a ese ser que convirtió este día en uno de los mejores de mi año, siendo bendecidos por el universo bajo un gran manto de lluvia, haciendo temblar al mismo Hades por el fuerte movimiento bajo sus sabanas recubiertas de mis mejores suspiros y recuerdos. A pesar de cualquier cosa esta tarde volví a ser tan solo yo, la chica enamorada del arte  de un Diego Rivera infiel pero jamas desleal, deleitando al universo desde su cama, sintiendo su corazón latir fuertemente junto al mio el cual decía a gritos ''¡Que importa haberse enamorado de un hombre casado!, si nadie lo podrá ser jam

''Quien se acuesta con niños amanece mojado'' Sabia y destructiva frase, todo comenzó entre besos y malas decisiones las cuales fueron propulsoras del deseo casi inexistente, eran tan solo dos almas destruidas por la vida que jugaban a ser las mas fuertes, allí se encontraba la Ninfula entre sabanas jugueteando con chiquillo como ella entre la única verdad que conoce, aunque con la diferencia de que la inocencia de la picara niña ya estaba erradicada de su ser. Parecía ser una noche prometedora aunque ninguno de los dos contaba con que el otro jamas seria capaz de sentir, ya que su dolor y su karma interno era tan fuertes que los alejaban de poder percibir el suave rose de la piel del otro, por que sencillamente una supuesta persona salvadora los destruyo y mato en el pasado, ese llamado primer amor. Allí estaba un joven, con la pésima experiencia que le había dado la vida y una rara habilidad para poder sentirse cómodo, por ello la Ninfula termino comprendiendo que